Aparcar de forma automática, sin conductor, está más cerca

El sistema Garage Parking Pilot supone un primer paso hacia la conducción pilotada, y ayuda al conductor a aparcar el vehículo. La maniobra de aparcamiento se realiza de forma completamente automática, sin necesidad de que el conductor permanezca en el vehículo. Mediante una aplicación en un smartphone será posible buscar plaza de aparcamiento, realizar el pago e incluso reservar servicios adicionales.

Para Audi, el lema a la hora de plantear la conducción pilotada es el siguiente: “Si no quiero conducir, dejaré que el vehículo tome el mando. Si disfruto de la conducción, por ejemplo en una carretera de montaña, entonces el que dirige soy yo”. Stefan Stümper trabaja para la empresa Audi Electronics Venture, subsidiaria de Audi para el desarrollo en el área de la electrónica. Y como afirma Stümper, “Los parkings y los garajes subterráneos son ideales para la aplicación de la suspensión pilotada. Nuestro sistema de aparcamiento asistido Garage Parking Pilot ayuda al conductor a realizar esas maniobras de aparcamiento con las que precisamente no se disfruta al volante”.

Stümper explica esta tecnología de futuro de la siguiente forma. Un usuario comprueba la disponibilidad de plazas libres en los parking más próximos a su destino utilizando el sistema de navegación. A la entrada al parking el conductor se detiene brevemente para seleccionar en la pantalla del sistema MMI cualquier otro servicio que pueda necesitar, por ejemplo la recarga automática de las baterías en el caso de que su vehículo sea un Audi e-tron. A continuación sale del vehículo, lo cierra y utiliza su Smartphone para emitir una señal que activa el sistema.

En el garaje, una unidad central de control gestiona el proceso de aparcamiento pilotado, que establece contacto inalámbrico WLAN con el vehículo para, en primera instancia, analizar datos necesarios como el tamaño del mismo. El computador central localiza la plaza de parking adecuada más cercana, y transmite un mapa esquemático del recorrido al sistema de navegación del vehículo.

Con esta información digital, se pone en marcha el vehículo y la dirección electromecánica lo guía a través del garaje a una velocidad de entre cinco y diez kilómetros por hora. El objetivo del proyecto es llegar a poder gestionar toda la maniobra de aparcamiento de forma fiable sin tener que realizar actualizaciones técnicas en el vehículo, utilizando sensores de producción en serie ya existentes para identificar su posición. Un algoritmo inteligente desarrollado por ordenador compila una imagen completa de todo el área que rodea al vehículo, y la compara con el mapa del recorrido a seguir en el garaje.

Si existe el más mínimo riesgo de que pueda producirse una colisión, se interrumpe el proceso. Y lo mismo se aplica si se pierde el contacto por radio con el ordenador central. La unidad de control del garaje supervisa todos los movimientos del vehículo con escáneres láser de alta precisión. Según Stümper, “el equipo tiene una precisión al centímetro, pero el verdadero reto no es conseguir la fiabilidad de los módulos individuales, sino que todos los controles y sensores necesarios trabajen juntos como si fueran un único sistema.

Para recuperar de nuevo su vehículo el conductor sólo tiene que utilizar de nuevo su Smartphone para realizar una llamada al equipo del garaje, indicando que le envíen su vehículo al punto de salida, lo cual puede incluso programarse a una hora determinada. El vehículo aparece de forma automática en el punto de recogida, y el conductor no tiene ni que pasar por caja, la tarifa del parking queda cargada automáticamente”.

“Este escenario sería sólo el comienzo”, asegura Stefan Stümper. “Nuestro primer paso sería el de equipar zonas específicas en los garajes para el funcionamiento del parking pilotado. El ordenador central controlaría todos los movimientos y la velocidad de los vehículos, para una máxima seguridad. Puesto que no hay personas en estas zonas de aparcamiento pilotado, los techos pueden ser más bajos, las plazas de parking más pequeñas y la iluminación menos potente, para ahorrar espacio y reducir el consumo de energía. También podemos instalar lavaderos automáticos de vehículos, sistemas de abastecimiento de combustible y, por supuesto, puntos de recarga para modelos e-tron”.

Queda mucho por solucionar antes de que todos estos sistemas entren en producción a gran escala, y en particular todo aquello referido a responsabilidades. Audi está tomando el ejemplo de la aviación, en la que el “piloto automático” es algo normal y desde hace muchos años, aunque al final la responsabilidad final sigue correspondiendo a los pilotos humanos. Lo mismo se aplicará al automóvil, y esta es la razón por la que en Audi se habla de “conducción pilotada”. El Garage Parking Pilot es un sistema importante en la nueva red de movilidad eléctrica que Audi ha denominado “Audi connect”. Un término que cubre todas las aplicaciones y desarrollos que forman cualquier tipo de enlace o conexión entre los automóviles Audi y sus propietarios, con Internet, con la propia infraestructura e incluso con otros vehículos, para servir y beneficiar a los clientes.

Cómo aparcar sin estrés con el asistente de aparcamiento

El conductor ya sólo tiene que utilizar el acelerador y los frenos al aparcar. El Park Assist (Asistente de Aparcamiento) ayuda al conductor en la maniobra de aparcar, reduciendo así el estrés que a veces provoca esta maniobra. El sistema mide, con la ayuda de sensores de ultrasonido, los huecos de aparcar con precisión y, a continuación, realiza las maniobras para aparcar el coche en el espacio, sin que el conductor tenga que realizar ninguna maniobra. El proceso automático de aparcar es tan rápido como cuando lo hace un conductor con mucha experiencia. El sistema se utilizará, por primera vez, en las series actuales de las clases A y B de Mercedes Benz. Con el aumento de la densidad del tráfico, la reducción del espacio para aparcar y las mayores exigencias de confort. La empresa Bosch, que ha creado este asistente para aparcar, facilita considerablemente la conducción diaria.

También es muy útil para huecos pequeños. La condición técnica indispensable para que el asistente de aparcar haga su trabajo es que el coche esté equipado con una dirección asistida eléctrica, con un sistema de ayuda de aparcar y un sensor de ultrasonido en ambos lados de los parachoques frontales respectivamente. Estos dos sensores de ultrasonido pueden medir el tamaño de un hueco de aparcar al pasar por él a una velocidad de hasta 35 km por hora. La distancia lateral hacia el hueco de aparcar y hacia los otros vehículos aparcados debería situarse entre 30 y 180 cm. Con un diseño de sistema que permite aparcar con varias maniobras, es suficiente encontrar un hueco que sea 80 cm más largo que el vehículo. El sistema es capaz de identificar obstáculos en el hueco o el bordillo de la acera. También funciona por la noche y cuando no hay un bordillo como orientación.

Si el hueco para aparcar tiene el tamaño suficiente, el sistema avisa al conductor, según el fabricante de coches y el modelo puede tratarse de una señal óptica, un sonido o un aviso verbal. Si el conductor activa la función de aparcamiento automático, el sistema calcula en fracciones de segundo el mejor trayecto para entrar en el hueco y las maniobras que debe realizar, gracias a los datos obtenidos previamente. El conductor separa las manos del volante y ya sólo tiene que utilizar el freno o el acelerador. El volante se mueve solo. El sistema electrónico controla la dirección asistida y los ángulos que se requieren para aparcar. Esto funciona de forma automática, incluso cuando se requieren varias maniobras para aparcar.

Con el asistente de aparcar, Bosch ofrece una función que proporciona al conductor más confort y una sensación de mayor seguridad. Se acabaron los intentos fallidos de aparcar que le ponen a uno de los nervios. Y todo ello sin el menor riesgo. Porque, si curre algo imprevisible, el conductor puede intervenir en cualquier momento en las maniobras y desconectar así el sistema automático.

Variantes del sistema de aparcamiento
Bosch ya presentó en 2006 un sistema para medir los huecos de aparcar que se utiliza en el Citroën C4 Picasso. Para turismos con dirección asistida hidráulica, Bosch presentará – dentro de este mismo año – otra variante del asistente de aparcar. El conductor realizará las maniobras, pero el sistema le guiará con observaciones sencillas hasta que alcance el ángulo correcto y le avisará al llegar a los puntos idóneos de detención y de cambio de maniobra.

Para un futuro algo más lejano, los ingenieros de desarrollo de Bosch están trabajando ya en soluciones técnicas que permitan aparcar automáticamente, sin que el conductor tenga que intervenir.

Nueva cámara retrovisora de coche para aparcar de forma más segura

Clarion potencia la seguridad en la conducción ofreciendo la posibilidad de ampliar las instalaciones de sus equipos multimedia con una cámara retrovisora.

La CC2011E es una cámara retrovisora ultracompacta que esta diseñada para hacer la función de retrovisor. La cámara se conecta a los equipos multimedia con pantalla Clarion y facilita el aparcamiento. ¿Su precio? 279 euros.

Con una mejor visión de la parte trasera del vehículo, se puede aprovechar mejor el espacio de aparcamiento, reduciendo las maniobras y agilizando el proceso. El tamaño súper-reducido de la cámara facilita su correcta instalación y adaptación al vehículo.

Como característica principal podemos resaltar su objetivo gran angular en color, que produce imágenes brillantes y claras facilitando la visión en situaciones de poca iluminación. Esta cámara necesita de un accesorio tipo “black box” CAA188 y CAA185 (vendido por separado) para poder adaptar la cámara a los distintos equipos fuente.

Esta caja oculta o “black box”, se encarga de conmutar el cambio de marchas del vehiculo con el equipo fuente más la cámara retrovisora. De este modo el usuario puede ver la parte trasera automáticamente cuando ponga la marcha atrás o manualmente. Los cables disponibles para cubrir la distancia de los diferentes tamaños de vehículos (vendidos aparte), son de 7m, 10m y 15m.

El 30 % de los conductores españoles necesita más de un intento para aparcar

Uno de cada tres europeos no es capaz de colocar correctamente su vehículo en una plaza de garaje en un único intento. Este curioso dato que evidencia nuestra poca destreza al volante ha sido extraido de un estudio llevado a cabo por TNS para Ford Europa.

El original estudio revela también que el 30 % del total de los conductores españoles asegura necesitar más de un intento para aparcar. El porcentaje en el caso de las mujeres se sitúa en el 37 %, mientras que en el caso de los hombres esta cifra alcanza el 24 %.

Más de la mitad de los conductores hombres de Europa considera que es mejor a la hora de aparcar en comparación con las mujeres, mientras que el 12 % dice que son ellas las que lo hacen mejor. En España, sin embargo, el 62 % de los hombres encuestados aseguró tener mayor destreza a la hora de estacionar el vehículo que las mujeres y tan solo un 4 % considera que la situación es la contraria. Un 29 % de las mujeres opina que los hombres aparcan mejor y un 30 % que son ellas las que se desenvuelven de mejor forma en esta tarea.

Por este motivo, la hora de aparcar tanto hombres como mujeres revelan que es uno de los momentos más estresantes de la jornada. Las compañias aseguradoras deberian tener en cuenta estos datos a la hora de crear las tarifas y condiciones de los seguros de coches.

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