Abdomen, papada y pecho, las operaciones de estética para hombres mayores de 50
Los hombres también luchan contra la grasa. La batalla contra los lípidos, en su nombre médico, o contra la gordura, el nombre coloquial, no es exclusiva de la mujer. Mucho menos cuando hablamos de edades a partir de los cincuenta, momento en que el estilo de vida empieza a reflejarse más en el cuerpo. A medida que los años pasan y los kilos suman, entre los hombres se nota especialmente en el abdomen, el pecho y el mentón.
Contenido de la información:
Poca novedad sobre el primer problema: la grasa se acumula en el estómago del varón y esa barriguita, primero, gran barriga, después, puede convertirse en un problema estético que no logran vencer ni el gimnasio ni la dieta. Para acabar con ella mediante estas herramientas hace falta no solo disciplina, sino tiempo y, en la mayoría de los casos, un buen entrenador personal.
Barriga
Eliminar la típica barriga, la grasa del abdomen, supone, además de una mejora estética, un punto de partida para comenzar una vida más saludable, lo que, a los 50, elimina riesgos para la salud cardiovascular.
“La cirugía estética tiene la solución más rápida, eficaz y con garantía de permanencia. Hablamos de la abdominoplastia, una operación que se realiza en quirófano y elimina el depósito graso, además de retirar la piel sobrante y recolocar la musculatura, distendida por el paulatino aumento de volumen en la zona y por los intentos de adelgazar”, explica el cirujano plástico Moisés Martín Anaya.
Dependiendo de cuál sea el caso, explica el cirujano, “el paciente puede pasar de entre una a cuatro horas en el quirófano, aunque el tiempo medio estimado es de noventa minutos”. No se trata, añade, de una cirugía sencilla, a la que puedan aplicarse prefijos como ‘mini’. “No existe la mini abdominoplastia”, advierte, “porque en esta intervención se abordan estructuras profundas y se trabaja en un área amplia, por lo que la anestesia recomendada es la general y el tiempo de estancia hospitalaria de cuarenta y ocho horas”, explica.
Papada
Mucho más sencilla es la reducción de papada. El depósito graso bajo el mentón es más común en el hombre y su origen se debe a la herencia genética. Aunque los años y la obesidad influyen, la papada se hereda. Para eliminarla gracias a los procedimientos estéticos hacen falta sólo veinte minutos y un cirujano plástico, estético y reparador. Porque, aunque se trate un procedimiento ambulatorio sencillo, bajo anestesia local y sedación, esta pequeña liposucción debe ser realizadas por especialistas.
Pechos caídos en hombres
Y volviendo a la anestesia general y al quirófano, la ginecomastia o acúmulo graso en el pecho masculino suele deberse también a una nutrición rica en hidratos y lípidos. Puede aparecer en la adolescencia —de hecho, el 70 % de los chicos pueden desarrollarla en estos años— pero, aclara Moisés Martín Anaya, “tiene a desaparecer de manera natural, pero a partir de los cincuenta, con el descenso de la testosterona, el pecho masculino puede aumentar, de ahí que se demande más esta intervención”.
Este tipo de ginecomastia se elimina mediante la liposucción. Esto es, se aspira la grasa depositada en las mamas, igual que se hace en el abdomen, mediante el tradicional sistema de cánulas. “Tampoco en este caso se precisa de hospitalización, pero sí, como siempre, que se somete a una cirugía, de unos cuidados postoperatorios”, añade el doctor.
Muchas veces el resultado se ve influido por lo bien o mal que se sigan las recomendaciones del cirujano. Sin embargo, eso ya es el resultado final. Para no tener que llegar a este punto, el propio cirujano recomienda “reducir el volumen graso con buena alimentación y deporte regular, además de manos expertas”.