A la hora de comer fuera de casa, el tupper es la mejor opción para garantizar una dieta equilibrada y más económica
La monotonía y la pereza provocan que se acaben las buenas costumbres gastronomícas, porque sólo el 60 % de los españoles considera que sigue la dieta más adecuada. Es más, cerca del 10 % de los españoles admite que su dieta es pobre y el 1 % incluso la define como ‘muy pobre’. Porque cuando se come fuera de casa, el “tupper” es la mejor opción para garantizar una dieta equilibrada y más económica, pero muchos abandonan esta costumbre por monotonía y pereza. Otras conclusiones del estudio analizado son que el consumo moderado de vino o cerveza puede ayudar a mejorar la salud cardiovascular. Por el contrario, tomar refrescos en exceso puede llegar a ser perjudicial para nuestra salud, puesto que aportan mucha cantidad de azúcar.
Contenido de la información:
- Comer de “tupper”, la opción más elegida y la más económica
- Qué debemos beber durante las comidas
- Comemos de tupper cuando estamos fuera de casa
- El tupper, un must para la nueva generación laboral
- Menús caros y no del todo recomendables
- Consejos para ahorrar y comer bien de tupper
- Comer de restaurante en el trabajo cuesta entre 100 y 300 euros al mes según la ciudad
- Los catalanes pican menos entre horas, utilizan más el “Tupper” y cocinan más sano
- ¿Comes de ‘tupper’? Uno de cada cuatro sí
- Los trabajadores que comen de restaurante apenas toman fruta fresca
Durante la época estival solemos cambiar nuestros hábitos alimentarios y de salud, pero al acabar el verano llega el momento de enfrentarse a la rutina diaria. Comer habitualmente fuera de casa, la falta de tiempo o el deseo de perder rápidamente esos kilos de más que suelen ganarse durante el verano pueden desembocar en una incorrecta alimentación, con el consiguiente peligro para la salud que eso conlleva. De hecho, solo un 61 % de los españoles considera que su dieta es buena, mientras que casi el 10 % cree que es pobre (8 %) o incluso muy pobre (1 %), según los datos del III Estudio Internacional Bupa-sanitas Health Pulse, de 2012.
Comprobar Lotería de Navidad 2024
Las mujeres son quienes más se preocupan de la alimentación. El 68 % de las consultas recibidas por el equipo de nutricionistas del Servicio de Promoción de la Salud de Sanitas proviene de mujeres, frente al 32 %, realizado por hombres.
Patricia Escribano, nutricionista de este servicio pionero de Sanitas, que ofrece apoyo en materia de nutrición a sus clientes a través del teléfono e internet, explica que los pilares básicos de la nutrición sana incluyen: realizar 5 comidas al día, masticar despacio, mantener una correcta hidratación y practicar ejercicio.
Comer de “tupper”, la opción más elegida y la más económica
La opción más elegida por aquellos que comen habitualmente fuera de casa y que, además, quieren controlar su dieta, es el “tupper”. Esta costumbre resulta la más económica, aunque su continua utilización puede generar monotonía y pereza, lo que conlleva que se acabe dejando.
Para evitarlo, el equipo de nutricionistas del Servicio de Promoción de la Salud de Sanitas trabaja con los clientes para planificar los menús semanales y que éstos sean variados y personalizados para su condición de salud. Como recomendaciones generales para comer de “tupper” y evitar la monotonía diaria, las nutricionistas aconsejan utilizar recipientes diferentes para cada plato, con el objetivo de que no se mezclen sabores y aromas, y mezclar alimentos y salsas en el momento en que se vayan a consumir.
A pesar de que la opción del “tupper” es elegida por muchas personas, hay quienes prefieren comer en restaurantes. Los nutricionistas del Servicio de Promoción de la Salud de Sanitas aconsejan que quien opte por esta alternativa pida platos que no necesiten una gran cantidad de aceite para ser cocinados, es decir, a la plancha, cocidos, al vapor, asado o en papillote. Según Patricia Escribano, otras de las recomendaciones para las personas que habitualmente coman en restaurantes es intentar elegir verdura como primer plato, consumir más pescado que carne, intentar no comer pan, evitar los platos muy condimentados, las salsas y los postres azucarados, comer despacio, intentar no comer del centro de la mesa, tomar abundantes líquidos evitando las bebidas con alcohol y las azucaradas y parar de comer cuando se tenga sensación de saciedad.
Treinta minutos para comer
El tiempo que dedicamos a comer también es importante. “Debemos disponer de al menos 30 minutos para comer. Si comemos de forma rápida no llegará la señal de saciedad al estómago, con lo que probablemente comeremos más cantidad de la que necesitamos”, aclara la doctora Clara Esteban, directora médica del Servicio de Promoción de la Salud de Sanitas.
Sin embargo, en ocasiones la falta de tiempo para comer hace que se opte por bocadillos o sándwiches. Si se recurre a esta opción, en el Servicio de Promoción de la Salud de Sanitas recomiendan que estén compuestos por fiambres magros, pescados azules como el atún y/o verduras.
Del mismo modo, no debe faltar en las comidas alimentos como los hidratos de carbono, las proteínas, verduras, frutas o lácteos mientras que el consumo de grasas, dulces, embutidos y carnes rojas debe moderarse. Según la doctora Clara Esteban, “es aconsejable evitar las salsas en las comidas, pudiendo acompañar los alimentos con aderezos a base de aceite de oliva, vinagretas, salsa de soja o de yogur desnatado rebajado con zumo de limón.”
Qué debemos beber durante las comidas
Si bien la bebida más aconsejable para acompañar a las comidas principales es el agua, las nutricionistas del Servicio de Promoción de la Salud de sanitas reconocen que en ciertos casos, una copa de vino o una cerveza, puede ayudarnos a mejorar la salud cardiovascular Asimismo, los refrescos deben consumirse de forma ocasional, puesto que contienen un exceso de azúcares simples que pueden generan gases y pueden afectar a la absorción de calcio.
Para finalizar la comida es aconsejable optar por fruta, que aporta fibra, vitaminas y minerales; o un lácteo, que aporta calcio y proteínas, y sólo de forma ocasional, algún tipo de dulce como tartas o chocolates. Hay personas que optan por tomar un café, sin embargo su consumo debe ser moderado, por lo que si durante el día se ha ingerido en exceso es mejor optar por algún tipo de infusión.
Comemos de tupper cuando estamos fuera de casa
Es más barato y teniendo en cuenta los tiempos que corren, los españoles elegimos el tupper cuando estamos fuera de casa. Las personas de entre 18 y 35 años de ciudades como Madrid, Barcelona, Zaragoza y Valencia son los que más simpatizan con esta solución para comer en el trabajo. Comer de menú a diario en algún restaurante supone un gasto medio de 217 euros mensuales.
Según un estudio para conocer los hábitos alimenticios de los consumidores en relación con su jornada laboral, elaborado por la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI), seis de cada diez españoles comen fuera de casa. De estos, el 58 % elige comer menú del día en restaurantes cercanos a su puesto de trabajo, mientras que el 37 % se lleva la comida de casa y tan sólo un 4 % opta por comer en algún restaurante a la carta.
Ya sea por comodidad, por necesidad o por precio, lo cierto es que cada vez son más las personas que se apuntan a la moda del tupper. Se trata de una tendencia creciente en el día a día de los profesionales que han decidido retomar la costumbre de la tartera y disfrutar de la comida casera, donde se mezclan los platos tradicionales y sabrosos con el bienestar y el ahorro diario.
El tupper, un must para la nueva generación laboral
Los españoles que más simpatizan con la solución de la tartera son las personas de entre 18 y 35 años de ciudades grandes como Madrid y Barcelona, donde más del 75 % de los habitantes que comen fuera de casa eligen el tupper a la hora de solucionar sus hábitos alimenticios. Les siguen de cerca los valencianos y los zaragozanos, que rondan el 70 %.
Este porcentaje disminuye de forma considerable en otras ciudades más pequeñas, en las que las personas tienen más facilidades para trasladarse a sus hogares y disfrutar de las horas del almuerzo: en Cáceres, Toledo y Santander sólo cerca del 45 % de personas se decantan por el tupper a la hora de comer fuera de casa.
Menús caros y no del todo recomendables
La mayoría de personas que eligen la opción del menú del día en algún resturante próximo a la oficina tienen entre 35 y 50 años y gastan una media de 217 euros al mes. Esta cifra ha disminuido mucho en los últimos tres años, un 15 % desde la última encuesta del FUCI en el año 2010.
Es importante destacar que el precio del menú varía notablemente en función de las ciudades: comer de menú en Madrid supone unos 280 euros mientras que en Cáceres o Toledo saldría por 180 euros, al mes.
Consejos para ahorrar y comer bien de tupper
Comer de tupper no tiene por qué ser monótono ni mucho menos caro, tal y como indican los nutricionistas de Yocomobien.es, una plataforma online que comercializa cestas con ingredientes sanos, para que sus clientes puedan preparar, en menos de 30 minutos, recetas para llevar al trabajo. El Menú Tartera incluye recetas muy sabrosas elaboradas con alimentos básicos de gran calidad. Está orientado a todas esas personas que no pueden comer en casa pero que tampoco se resisten a una buena nutrición. El punto fuerte de esta cesta es el precio porque cada ración cuesta menos de 3 euros.
Yocomobien.es recomiendan elaborar un menú “portátil” completo y equilibrado que incluya alimentos proteínicos, hidratos, frutas y verduras. Algunos consejos básicos para preparar un tupper saludable y variado son:
Elige carnes y pescados
Con cortes jugosos como muslos de pollo o dados de lomo. Los filetes finos recalentados tienden a pasarse en el microondas, aunque exprimir un chorrito de limón antes de recalentarlo también los hace más jugosos.
Cada cosa en su momento
Algunos platos mejoran con el tiempo, como la empanada o las lentejas pero otros, como las ensaladas deben ser aliñadas justo en el momento de tomarlas.
Envasa las salsas caseras y los sofritos aparte
Si los congelas junto al arroz o la pasta puede ser que el resultado sea una papilla uniforme y poco apetecible.
Vigila la temperatura de la fiambrera
Si no hay manera de mantener el calor, es preferible refrigerar los alimentos hasta el momento de calentarlos y consumirlos.
Comer de restaurante en el trabajo cuesta entre 100 y 300 euros al mes según la ciudad
Seis de cada diez españoles comen fuera de casa al no tener tiempo suficiente para regresar a su hogar. Esta situación se da, especialmente, en las grandes ciudades, mientras que en las más pequeñas como Toledo, Cáceres, La Rioja o Santander el porcentaje es considerablemente inferior. Lo que si parece ser una tónica general es el hecho de que el 58 % españoles optan por comer de menú, mientras que sólo un 4 % come a la carta.
También se observa una tendencia creciente en las personas que se traen la comida de casa (37 %). Respecto al gasto, que varía según las rentas de cada individuo y la decisión de donde comer, oscila entre los 100 euros y los más de 300 euros en ciudades como Madrid o Barcelona, según datos de un estudio que acaba de realizar la Federación de Usuarios-consumidores Independientes, FUCI, en varias ciudades españolas para conocer los hábitos alimenticios de los consumidores en relación con su jornada laboral. Así, el coste medio por persona en España es de más de 217 euros al mes, es decir, un 15 % menos respecto al último estudio de FUCI del año 2010.
Para Gustavo Samayoa, presidente de FUCI, “este descenso en el precio se debe a que los restaurantes están realizando ofertas muy buenas para captar clientes, a la vez que otros ofrecen comer un solo plato en vez de primero y segundo, lo cual abarata el coste. Además, muchos consumidores combinan el comer fuera de casa con traer el tupper al trabajo como medida de ahorrar unos euros”.
FICHA TÉCNICA DEL ESTUDIO
Fecha encuesta: enero de 2013.
Ámbito geográfico:14 ciudades españolas.
Recogida de información: entrevista personal.
Estratificación: por situación laboral.
Tamaño de la muestra: 2.000 personas.
AÑO 2010 | Coste | Comen fuera | Donde | Que comen | Que beben |
A Coruña | 13 € | 67 % | |||
Barcelona | 14 € | 81 % | |||
Bilbao | 12 € | 62 % | |||
Cáceres | 10 € | 44 % | |||
La Rioja | 11 € | 55 % | De cuchara 11 % | Agua 55 % | |
LasPalmas | 10 € | 71 % | |||
Madrid | 15 € | 83 % | Menú 66 % | Carne 19 % | Cerveza 18 % |
Murcia | 12 € | 63 % | A la carta 5 % | Pescado 15 % | Vino 13 % |
Oviedo | 11 € | 51 % | La trae 28 % | Pasta 18 % | Refrescos 9 % |
P. Mallorca | 11 € | 64 % | |||
Pamplona | 12 € | 58 % | |||
Santander | 11 € | 55 % | Otros 1 % | Verdura 14 % | Otros 5 % |
Sevilla | 12 € | 63 % | Fast food 20 % | ||
Toledo | 10 € | 42 % | Otros 3 % | ||
Valladolid | 12 € | 58 % | |||
Valencia | 13 € | 72 % | |||
Zaragoza | 13 € | 66 % |
AÑO 2013
COSTE | COMEN FUERA | DONDE | QUE COMEN | QUE BEBEN | |
A Coruña | 11 € | 61 % | |||
Barcelona | 13 € | 75 % | |||
Bilbao | 10 € | 54 % | |||
Cáceres | 9 € | 44 % | |||
La Rioja | 10 € | 52 % | De cuchara 15 % | Agua 41 % | |
Madrid | 14 € | 79 % | Menú 58 % | Carne 17 % | Cerveza 25 % |
Murcia | 10 € | 58 % | A la carta 4 % | Pescado 12 % | Vino 19 % |
Oviedo | 11 € | 51 % | Trae comida 37 % | Pasta 19 % | Refrescos 14 % |
Santander | 10 € | 46 % | Otros 1 % | Verdura 22 % | Otros 1 % |
Sevilla | 11 € | 61 % | Comida rápida 13 % | ||
Toledo | 9 € | 43 % | Otros 2 % | ||
Valladolid | 11 € | 62 % | |||
Valencia | 12 € | 72 % | |||
Zaragoza | 11 € | 67 % |
Respecto al gasto, que varía según las rentas de cada individuo y la decisión de donde comer, oscila entre los 100 y los más de 300 €. Así, el coste medio por persona en España es de más de 217 euros al mes, es decir, un 15 % menos respecto al último estudio de FUCI del año 2010.
Samayoa añade que “este descenso en el precio se debe a que los restaurantes están realizando ofertas muy buenas para captar clientes, a la vez que otros ofrecen comer un solo plato en vez de primero y segundo, lo cual abarata el coste. Además, muchos consumidores combinan el comer fuera de casa con traer el tupper al trabajo como medida de ahorrar unos euros”.
Por ciudades
El precio varía mucho en función de la ciudad donde lo hagamos. Comer de menú del día en Madrid supone unos 280 euros al mes, mientras que en Cáceres o Toledo esa cantidad se reduce a solo 180 euros.
La elección de los platos depende y mucho de cada ciudad y está íntimamente ligada al clima. Así, en ciudades del norte optan por platos de cuchara, mientras que en el Levante eligen más las verduras. Asimismo, los españoles siguen siendo más carnívoros, aunque crece el porcentaje de las personas que comen pescado. La mayoría de los consumidores elige restaurantes cercanos a su lugar de trabajo que disponga de menús económicos con comida casera, frente a un porcentaje que sigue descendiendo que opta por la llamada fast food.
Por edades, los españoles de entre 18-35 años optan mayoritariamente por la tartera, entre los 30-50 años eligen sobre todo el menú del día. Por último, en el grupo de personas de más de 50 años hay un equilibrio en ambos aspectos.
Bebida
Respecto a la bebida elegida para acompañar las comidas, cuatro de cada diez encuestados opta por el agua. De las bebidas alcohólicas, la cerveza sigue ganándole la partida al vino.
Pocas reclamaciones
Aunque más de la mitad de los encuestados reconoce que alguna vez en su vida se han sentido engañados a la hora de comer, tan sólo un 6 % asegura que ha puesto una reclamación para denunciar algún tipo de agravio. Entre las quejas más comunes se encuentran las facturas inadecuadas (51 %), mal servicio (23 %), falta de higiene (11 %), exposición inadecuada de alimentos (6 %), inexistencia de lista de precios (5 %), negación de las hojas de reclamaciones (3 %) u otras (1 %)
DERECHOS CONSUMIDORES
En materia de restauración (restaurares, bares y cafeterías), existen una serie de obligaciones que deben cumplir los establecimientos dedicados a la restauración y que los consumidores deben tener en cuenta a la hora de acudir a uno de ellos.
– El establecimiento debe mostrar en lugar visible –en el interior y exterior- la lista de precios de todos sus servicios, indicando si existe alguna diferencia por el lugar donde se realice el consumo –mesa, barra o terraza-.
– Los precios deben ser globales, no se pueden indicar ni cobrar el servicio, el cubierto, la carta, la reserva o cualquier otro concepto similar.
– No nos pueden cobrar por servicios –como el pan o aperitivos- que no solicitemos siempre y cuando los rechacemos y no los consumamos.
– Queda especialmente prohibido poner precios como s/m -según mercado-. Es decir, en todos los casos los servicios que se cobren deben venir claramente especificados.
– Los restaurantes deben ofrecer al cliente una carta de platos y una de vinos redactados en castellano –en francés e inglés para los restaurantes de lujo, primera y segunda categoría-. Estas cartas deberán indicar además los “menús de la casa”, que son obligatorios y que incluirán en todo caso los servicios de pan, vino y postre para los restaurantes y “plato de la casa” para las cafeterías -que deberá incluir pan y vino-. Un menú cuyo precio no puede ser superior al 80 % del total de la suma de sus componentes.
– Es necesario emitir una factura en la que figuren los conceptos y precios cuando el cliente lo solicite –por el menú puede emitirse simplemente el concepto de menú, no su descomposición-.
– Debe el establecimiento cuidar el funcionamiento de las instalaciones, proteger los alimentos expuestos sobre la barra, mantener un estado óptimo de higiene y garantizar el buen trato a los clientes.
– Dado su carácter de local público su acceso es libre y no se pueden hacer discriminaciones injustificadas. Sin embargo existe el derecho de admisión por el cual el local puede denegar la entrada a quienes incumplan las normas ordinarias de convivencia.
– Derecho de solicitar la hoja de reclamaciones y el establecimiento la obligación de tenerla y ofrecerla al consumidor si este la solicita.
Los catalanes pican menos entre horas, utilizan más el “Tupper” y cocinan más sano
Los hogares catalanes gastan 21 euros más al mes en productos de Gran Consumo (alimentación + droguería) que la media española, según se desprende del análisis realizado por la consultora especializada en paneles de consumidores Kantar Worldpanel con motivo de la Diada hoy 11 de septiembre. Así, en el primer semestre de 2010 cada hogar catalán destinó 2.125 euros a la compra de productos de alimentación y droguería, cuando la media española se sitúa en los 1.999 euros (+126 euros al semestre).
Si bien acuden a las tiendas con la misma frecuencia que el resto de Comunidades Autónomas, adquieren un producto menos que la media en cada ocasión y sin embargo gastan dos euros más en cada cesta, destinando 50 euros en cada compra frente a los 48 que destina la media española. Este mayor gasto se explica principalmente por la composición de su cesta de la compra, en las que destacan los productos frescos, especialmente las frutas y hortalizas. Los catalanes también son los consumidores más intensivos de productos en conserva, productos congelados y pastelería y bollería, mientras que son los menos consumidores de leches y batidos.
En cuanto a sus hábitos de consumo de estos productos en el hogar, el análisis de WorldpanelUsage, el mayor estudio de hábitos de alimentación en el hogar, desvela que Cataluña es una de las regiones donde menos se practica el “picoteo” en comparación con el total España, por su menor índice de consumo entre horas. Sin embargo, los catalanes consumen más productos después de cenar que la media (lo hace un 20 % de los catalanes frente al 17,7 % del total España). Cataluña se postula también como una de las Comunidades Autónomas con mayor uso del Tupper (alimentos y bebidas cogidos y/o preparados en casa para consumir fuera), del que hace uso un 28,3 % de los catalanes frente al 23,2 % de la media.
Respecto a los modos de preparación de los platos, en las mesas catalanas predominan por encima de la media los platos hervidos o al vapor, mientras que los guisos pierden mucha importancia respecto a la media.
Según Eric Batty, New Business Manager de Kantar Worldpanel, “en definitiva, el consumidor catalán es menos afín al picoteo en casa, excepto después de la cena, es también más planificado por su mayor uso del Tupper, y muestra una mayor preocupación por la salud que el resto de España, destacando en este caso un mayor consumo de frutas y hortalizas y una mayor tendencia a cocinar hervido o al vapor”.
¿Comes de ‘tupper’? Uno de cada cuatro sí
Uno de cada cuatro españoles utiliza el tupper de forma habitual. Alrededor de 11 millones de individuos, o lo que es lo mismo, el 24,4 % de la población española prepara algún tipo de alimento o bebida en casa para consumir fuera (“consumo Tupper”) una media de cuatro veces por semana, según datos del informe “Usos y Motivaciones de consumo día a día en casa” de Kantar Worldpanel sobre consumo en el hogar.
Estos hábitos se traducen en más de dos mil millones de tuppers que se prepararon en el último año (octubre 2008 a septiembre 2009), lo que supone una ralentización en el crecimiento de estos momentos, que fue del +0,4 %, cuando en el mismo periodo del año anterior habían crecido un +8,4 %.
Disminuye el consumo en el trabajo
El consumo que hacemos en el trabajo, ya sea en forma de desayuno, merienda o alternativa a comer fuera, es el que ha protagonizado el mayor retroceso en este periodo, con un -5,4 % respecto el año anterior. Se trata de un descenso importante, especialmente después de que en 2008 anterior creciera cerca de un 14 %, aunque el balance global en los dos últimos años sigue siendo positivo.
El control sobre la salud favorece el consumo de “bocadillos”
Otro elemento importante que dibuja el consumo fuera del hogar de productos cogidos de casa es el consumo infantil. Sin duda el crecimiento poblacional ha contribuido al aumento del 8 % experimentado por las ingestas en el lugar de estudio, aunque los expertos del estudio apuntan hacia otros motivos como la búsqueda de un mayor control por parte de los padres: “actualmente se están llevando a cabo varios proyectos para fomentar el consumo de productos saludables en las escuelas, que los padres secundan preparando personalmente los alimentos y bebidas que los hijos consumirán fuera de casa”, comenta Núria Moreno, Worldpanel Usage Manager y responsable del estudio.
Por otra parte, el informe identifica el consumo “en la calle” como un momento emergente en el contexto del consumo infantil fuera del hogar, puesto que ha crecido un +4,6 % en este último periodo, a un ritmo mayor que en 2008.
%Evolución del “consumo Tupper” por lugar de uso | ||
Oct.07 – Sep.08 vs. año anterior | Oct.08 – Sep.09 vs. año anterior | |
Total “Consumo Tupper” | +8,4 % | +0,4 % |
Trabajo | +13,8 % | -5,4 % |
Escuela / instituto / universidad | +11,7 % | +8,0 % |
En la calle | +1,8 % | +4,6 % |
Fuente: ‘Usos y motivaciones de consumo día a día en casa’ de Kantar Worldpanel
Los trabajadores que comen de restaurante apenas toman fruta fresca
Los españoles consideran que tienen una dieta más equilibrada que hace diez años si bien tienen, en general, poco conocimiento sobre lo que comen, especialmente las grasas, según se desprende del informe ‘Hábitos de vida saludables’, de Quota Research. Sólo un 5 % de las personas que comen habitualmente en restaurantes o cafeterías, en días de trabajo, consume fruta fresca.
“La mayoría de los participantes en el Informe, casi seis de cada diez entrevistados, conocen la existencia de grasas buenas y malas, aunque un 35 % no sabe/no contesta, lo que indica un alto desconocimiento sobre las grasas, en general”, ha señalado Rafael Malo de Molina, director general de Quota Research, firma con más de 15 años de experiencia en el sector de Consultoría en Investigación de Mercados.
Tres de cada diez entrevistados considera su peso actual como “elevado”, existiendo un 60 % que consideran su peso “normal” y las mujeres son más exigentes con esta cuestión que los hombres.
El Informe Quota Research señala, en este sentido, que algo más de la mitad de los encuestados, no obstante, desearía perder algún kilogramo, sobre todo las mujeres. En el lado contrario, cabe destacar que un 5 %, sobre todo hombres, desearía ganar peso.
Diabetes e hipertensión
Según se desprende del informe, el 16 % de los entrevistados padece alguna enfermedad, siendo la diabetes y la hipertensión las más frecuentes (un 40 % entre ambos). Y respecto al consumo de tabaco, aproximadamente un tercio de los entrevistados se declara fumadores, aunque cabe destacar que casi la mitad no ha fumado nunca en su vida.
En cuanto a la actividad física, un 79 % de los entrevistados declara una actividad diaria sin grandes desplazamientos o esfuerzos (tanto de pie como sentados). Leer, ver la televisión e ir al cine son las actividades realizadas mayoritariamente por el público entrevistado.
Por su parte, las principales fuentes de información en temas de salud y alimentación son los médicos, la televisión y las revistas -en total, un 75 %-, siendo los mayores de 64 años los que más confianza le otorgan al colectivo médico. El Informe Quota Research “Hábitos de vida saludables” señala también que, para el 40 % de los entrevistados, su dieta actual es, sobre todo, más equilibrada que hace diez años, para el 30 %, es rica en pan y para el 25 % pobre en pescado. Comer fuera de casa
Los hábitos de alimentación saludables se relajan cuando llega el viernes y el fin de semana. Entre un 60 % y un 70 % de los entrevistados en el Informe Quota Research confirman esta situación. Los motivos que se alegan son el consumo de alcohol y de grasas, que parece ser mayor el fin de semana. Otro de los detonantes de este relajo en lo que se refiere a hábitos saludables es, por ejemplo, que los viernes, la elección de dulces como postre, en los menús de restaurantes o cafeterías, es de más de un 50 %, frente al 24 % que se registra, en cambio, los lunes.
Mención especial hay que hacer a los “fritos”. Dos terceras partes de estos establecimientos suelen utilizar para estos platos aceite de girasol. En cambio, en los hogares españoles el aceite de oliva sigue siendo el más utilizado, el 55 %.