5.000 voluntarios velarán por la calidad de las playas españolas y su mantenimiento
5.000 voluntarios en colaboración con 30 entidades de custodia del territorio en todas las Comunidades Autónomas situadas en el litoral se encargarán de retirar residuos y limpiar playas, conservar y restaurar la vegetación para la estabilización de sistemas dunares, mejorar del paisaje de playas urbanas, recuperar zonas deterioradas, controlar las especies exóticas invasoras, mejorar del hábitat de la fauna autóctona, restaurar elementos vinculados a usos tradicionales sostenibles y formar, comunicar y sensibilizar ambientalmente sobre el litoral a los turistas que disfrutan de las playas de España.
Las actividades previstas para el mes de agosto tendrán lugar en las playas de Eucaliptus y de la Paella (Tarragona); puertos de Sant Feliu de Guíxols, Marina Port d’Aro, Marina Palamós, Llafranch, Fornells i Estartit (Girona); El Campello (Alicante); playas de los Lances y de Camposoto (Cádiz); playas de los acantilados de Maro-cerro Gordo: Calaiza, Cantarriján, Molino de Papel, Maro, Las Alberquillas y El Cañuelo (Málaga y Granada), playa del Espigón (Huelva); playa de El Tostadero y sistema dunar de la playa de Merón (Cantabria) y playas de San Antolín y Ballota (Asturias).
En la playa del Espigón, en Huelva, las actividades correrán a cargo de la Sociedad Española de Ornitología SEO/birdlife, que para el día 10 ha organizado una jornada de observación de aves, mientras que el día 11 las actividades estarán centradas en la recogida de residuos y en la realización de talleres y un stand informativo.
Asimismo, el 26 de agosto SEO/birdlife realizará sendas actuaciones en las playas de Eucaliptus (Amposta, Tarragona) y El Médano (Santa Cruz de Tenerife). En la playa de Eucaliptus están previstas actividades de limpieza, mejora ambiental y puesta en valor de la playa y hábitat halófito y psamófilo, mientras que en El Médano se realizarán mejoras ambientales de las playas y dunas costeras, con especial atención al entorno de Montaña Roja.
Por su parte, la Fundación Oxígeno tiene previstas tres jornadas de sensibilización y mejora del entorno, los días 22, 23 y 24 de agosto, en las playas de El Tostadero (Cantabria) y San Antolín y Ballota (Asturias). También en Cantabria, la Asociación Red Cambera dedicará el fin de semana del 18 y 19 de agosto a tareas de formación, inventario y erradicación de flora invasora en el sistema dunar de la playa de Merón.
En Andalucía, del 11 al 25 de agosto, la Fundación FIRE y la Fundación MIGRES organizan acciones en las playas de Camposoto y los Lances (Cádiz), respectivamente, mientras que la Asociación Hombre y Territorio realizará acciones de custodia del litoral en el paraje natural de los acantilados de Maro-cerro Gordo (25 y 26 de agosto).
En Cataluña, GEPEC-edC dedicará los lunes y viernes a tareas de limpieza y mantenimiento en la playa de la Paella, y en Girona, la Asociación Nereo tiene previstas acciones de sensibilización en instalaciones náuticas. En la Comunidad Valenciana, la asociación Avinença realizará cuatro salidas durante el mes de agosto en la playa de El Campello (Alicante).
Iniciativa del Gobierno
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Fundación Biodiversidad, ha puesto en marcha este programa denominado “Playas, Voluntariado y Custodia del territorio”, que pretende implicar a 5.000 ciudadanos en la protección integral de la calidad de las playas a través de 35 acciones relacionadas con su mejora y conservación, trece de las cuales están previstas para este mes de agosto en Andalucía, Asturias, Canarias, Cantabria, Cataluña y la Comunidad Valenciana. El Secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, considera que “este programa es un ejemplo de la necesaria coordinación entre las administraciones, las ongs y los ciudadanos. Las playas son de todos, también debemos protegerlas y cuidarlas todos”.
Con esta iniciativa se pone en valor la importancia de la costa en España, que cuenta con una longitud de casi 8.000 km y una importante variedad de playas y sistemas dunares que es necesario preservar. Estos ecosistemas, además, se presentan como un espacio idóneo para el desarrollo de actividades económicas generadoras de riqueza y empleo que, adecuadamente ordenadas, pueden contribuir a su conservación.